Retsé

Historia II. El valle de la sabiduría


Estaba un poco asustada al desconocer el futuro. Obvio, no sabía todo y en mi cabeza rondaban demasiadas preguntas. Les cuento que siempre me pasa… Algo apasionante y a la vez agotador. Vi una catarata que bajaba entre la maleza. Me acerqué para hidratarme, ya mi cuerpo había sido entrenado para optar por un estilo de vida saludable. El agua, recalco: EL AGUA; refresca más y armoniza con mi sangre. Es todo un enigma. Luego les cuento. Soy curiosa. Me acerqué al centro del terreno, cautivada por esa luz esmeralda. La toqué discretamente pero estaba caliente… y ese terreno tan suave… me tragó. Otra vez, ¡noooo! ¡Qué episodios los míos! Allí iba, nuevamente, siempre con hojas, pero esta vez con raíces y tierra. Quién sabe qué otras especies me habré topado. Todo se detuvo, llegué a un lugar alto. Tal vez a 2000 metros de altura. Todo estaba muy tranquilo, aunque a lo lejos se veía mucha gente. Bueno, había pensado buscar gente en Costa Rica, pero parece que ahora estaba en otro lugar. No estaba segura. Me di la vuelta, había una caverna. De allí salía esa misma luz esmeralda. La perseguí. Vi una silueta de alguien, si así se puede describir. — Retsé. ¿Dónde habías estado? — ¿Conoces mi nombre? ¿Quién eres tú? ¿Dónde estoy? ¿Qué es todo esto? No entiendo, ¿qué está pasando? — Sé que hay muchas preguntas. Al tiempo se irán vislumbrando. Haz perdido algo, no puedes distraerte por los demás o por lo demás. Muchos lo andan buscando… pero… para destruirlo. Escóndelo. No puedo revelarte nada. Solo piensa en mí y búscame. Siempre puedo llegar. — No entiendo, dame al menos dos segundos para entender este proceso. Toda mi vida he buscado respuestas. No me enredes más en esta odisea. — Toma tu collar, guárdalo. Solo eso. Has llegado al Valle de las Leñas, en Mendoza, Argentina. Muy lindo lugar, con historia y misterio. Perdiste tu placa de olivo durante el aterrizaje a Costa Rica. Solo una petición, guárdalo. Que nadie te la robe. Por cierto, soy Divad, el león. — Vamos a caminar por la montaña, estoy muy estresada. También con adrenalina. Todo esto me parece mágico, pero tengo mucho en mi cabeza. En mi vida. Noticias Mi Ciudad

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.