ADN Energético

Construir el hogar


No nos habíamos perdido. Nos habían perdido. Nunca nos fuimos, solo estábamos escondidos entre las montañas.

Fue y es el principio de todo. Ahora es una creación fresca. Unidad que despierta la conciencia con amor… Amor entre nosotros.

Nos habían separado… No sabemos por qué ni cómo sucedió, pero siempre hubo una especie de hilo que nos unía.

Yo te espero. Tú me esperas. Nos esperamos con ansias de celebrar, de abrazarnos y volver a sentir ese olor tan de nosotros.

Es la misma esencia que ronda de acá para allá. Necesitamos encontrarnos… Todos… Sabemos que esa energía explosiva nos salvará el alma… Y la de ellos.

Esa es la verdadera descendencia. No idealizada. ¡No! Es conexión pura. Conexión que despertó esa búsqueda de identidad, de pertenecer a algo y a alguien, de quitar la “orfandad” y acentuar la “familia”.

Si quieres recibir nuestros escritos y llenarte de luz, puedes suscribirte aquí.

Dibujo: Freepik
Noticias Mi Ciudad

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.